Nacido en Rumania el 05 de Mayo de 1918, ocupado por lo nazis en 1941, junto con su familia fueron deportados a un ghetto en Ucrania, desde ahí fue separado de su familia y llevado junto con otros jóvenes a un campamento de trabajo forzado, como esclavo. Motel es uno de los sobrevivientes quedando hasta el final de 1943, cuando los nazi empezaron a retirar sus tropas.
Debido a las condiciones inhumanas a las que enfrentó su salud quedó afectado, principalmente el corazón. Volvió a Rumania en 1945, donde permaneció hasta 1947. En ese año un familiar de Motel hizo los trámites para poder inmigrar a Chile, donde finalmente llegó en 1948.
WIZO Chile surge en 1925, cinco años después de la creación WIZO central convirtiéndose, en la filial de WIZO más antigua del continente. Sus comienzos se remontan, a la llegada al país, Ariel Benzión, junto a su esposa, Ida Siegler de Benzión, reunió a un pequeño grupo se señoras dando forma a la Federación WIZO de Chile.
Un acontecimiento quizás desconocido para muchos, que permitió la creación de una de las instituciones más prestigiosas de la Comunidad Judía de Chile, que en sus mas de 90 años de existencia registra como su primera presidenta a Raquel Pomeranz (Z.L). Hoy con mil quinientas javerot, a través de más de cuarenta grupos que activan en sus filiales de regiones
En Chile, a través de WIZO CEFI, se realizan diversas labores sociales en beneficio de los más vulnerables del país, destacando la realizada a través de la red de Escuelas “República de Israel” integrada por 11 escuelas y 2 liceos y la entrega de becas “Itzhak Rabin” a destacados alumnos que provienen de estos establecimientos.
Los padres eran campesinos y los nazis los deportaron al Gueto cercano a su pueblo. Paulina logró escapar a Alemania gracias a la gestión de una amiga bajo la identidad falsa de Genovena Zavada, aria y polaca. Comenzó a trabajar con una familia de alemanes durante 3 años, hasta que finalizó la guerra. Gracias al apoyo de sus tíos logró venir a Chile. Aquí trabajó con el tío en confecciones de camisas, conoció a su marido, Bernardo Bohorodzaner y formaron familia.
Tras la invasión de Varsovia, Irene estudió en la escuela clandestina gracias a que su abuela la pudo pagar. En 1940 los confinan al Gueto. En menos de tres semanas deportaron a toda su familia menos a su padre y a ella. Trabajó en una peletería alemana. Se salvó de 3 selecciones y su padre también. Para salvarse de otra deportación se escondió en diferentes lugares hasta el fin de la guerra.